¡¡¡Arrrr, como odio a esos marditos juegos de rol!!! XD
Los
odio porque son realmente adictivos, porque no consigo quitármelos de
la cabeza, porque cuando juego miles de nuevas ideas fluyen a mi mente
enfebrecida de adicto, y un picor se extiende por mis manos mientras
pienso en mil y una campañas a las que dirigir con cientos de sistemas
nuevos. Cuando juego, quiero dirigir, cuando dirijo, quiero jugar, y
cuando ni juego ni dirijo, dedico mi tiempo a mirar blogs para ver como
otra gente lo hace, como un pobre onanista ludópata (¿ludonista?).
Pienso que sin los juegos de rol tendría tiempo para escribir una gran
novela o para hacer despegar ese negocio que me permitiría vivir la vida
padre, pero la verdad es que sin los juegos de rol seguramente nunca
hubiera pensado en escribir una novela, y mis ideas de negocios tienen
que ver con el mundo del rol (así que lo de vivir la vida padre…).
Odio
los juegos de rol porque no tengo ni el tiempo ni el dinero para jugar a
todos los que me gustaría ni de la forma que me gustaría, ni con la
gente con la que me gustaría jugar alguna vez.
Sois unos cabrones, juegos de rol, pero no puedo evitar quereros.
Salud2
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